Consejos útiles para una conducción segura
Conducir un coche no es una tarea sencilla. Requiere un enfoque y una visión correctas. Para las personas alrededor de 60 años, conducir cualquier tipo de vehículo puede suponer un riesgo si su vista no está a la altura (o corregida por gafas). Según algunas investigaciones, la capacidad de una persona para ver objetos que se mueven mientras está también en movimiento se deteriora con la edad, en comparación con la observación de objetos estacionarios.
A medida que una persona envejece, habilidades como la conducción se vuelven un desafío porque la visión periférica, además de la capacidad de reacción, se vuelven limitadas. Aquí tienes algunos consejos que los conductores mayores deben tener en cuenta antes y durante la conducción:
Escribir mensajes de texto mientras se conduce es una de las cosas más peligrosas que un conductor puede hacer. |
1. Nunca uses el móvil mientras conduces - Esto aplica a todos los conductores, no sólo los mayores. Sin embargo, los mayores deben tomar esto muy en serio, ya que reaccionan de manera más lenta ante una emergencia, incluso cuando no están distraídos por un teléfono móvil. Este peligro se ha mostrado en más de 120 estudios sobre los riesgos de hablar por el móvil mientras se conduce realizados por el Instituto de la Seguridad Vial (IIHS). Además, la Escuela de Harvard de Salud Pública descubrió en 2000 que los móviles minimizan el tiempo de reacción y la habilidad al volante de los conductores mayores más que de los jóvenes. ¡Y nunca, jamás, envíes mensajes mientras conduces! Escribir mensajes y conducir constituye un riesgo tan grande como beber y conducir.
2. En una intersección, ten especial cuidado - El IIHS descubrió que el 40 por ciento de las colisiones mortales en las que hay involucrados conductores mayores tuvieron lugar en intersecciones. A menudo estos choques ocurren por no ceder el paso, sobre todo al hacer giros a la izquierda
3. Evita tomar rutas nuevas durante la noche - Según el Consejo de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, los índices de muertes en tráfico son 3 veces mayores por la noche comparado con el día. Como más y más motoristas conducen de forma más agresiva por la noche, las colisiones fatales son más probables, haciéndolo más peligroso aún para personas mayores. Además, incluso si llevas gafas que crees que funcionan bien, quizá no estés preparado para reaccionar ante destellos o señales que sean difíciles de leer, además de otros desafíos que puedes encontrar en la carretera. Es una buena idea para personas mayores evitar las carreteras con las que no estén familiarizados, especialmente aquellas con poca señalización e iluminación y giros inconsistentes.
Antes de conducir, evalúa si estás o no en forma adecuada, ya sea física, mental o emocionalmente. |
Evalúa tu habilidad al volante – Es muy importante que seas consciente de tus habilidades como conductor. La mejor manera de hacerlo en la carretera es que alguien vaya en el coche contigo y juzgue cómo conduces. Si normalmente conduces solo y te das cuenta de que siempre tocan la bocina los demás conductores o has sido detenido por la policía, entonces debes pensar en evaluar tus habilidades de conducción.
Estos son sólo algunos consejos que pueden ayudarte a ti y a otros adultos a conducir con seguridad en la carretera. Sin embargo, incluso si sigues estos consejos pero no te sientes seguro con tu vista, no debes conducir hasta que no hayas pasado un examen ocular.
Conducir con la visión corregida
Si ya te han corregido la visión, también puedes tomas sencillas precauciones, como asegurarte de mirar a ambos lados en las intersecciones. El Consejo de Visión ha descubierto que muchos americanos mayores no sienten la necesidad de pasar exámenes de la vista de forma regular. En realidad, más de la mitad de la población de América no ha pasado nunca un examen de la vista completo. Lo que es peor es que en algunos estados no se exige a los conductores mayores realizarse una prueba de visión antes de renovar su permiso.
Aquí tienes algunos pasos que pueden guiarte para mantener un vista sana y seguir conduciendo bien incluso siendo mayor.
1. Realizar una revision de la vista anual – Es muy recomendado (y muy importante) que cualquiera de más de 60 años pase exámenes regulares de la vista. Tu oculista puede asegurarte que sus ojos están libres de cualquier desorden relacionado con la edad como la degeneración macular (DMAE) o las cataratas. Si tu oculista descubre que tienes presbicia, puede recetarte las gafas correctas para conducir, leer o trabajar.
Controles regulares de la vista te ayudarán a mantenerte a ti y a los demás a salvo en la carretera. |
2. Reduce la velocidad durante la conducción nocturna – A medida que nos hacemos mayores, nuestras pupilas se reducen en tamaño y no se dilatan tan fácilmente durante la noche. Esto es un cambio normal debido a la edad. Debido a ella sólo un tercio de la luz ambiental llega a la retina de tu ojo cuando tienes 60 años, comparado con cuando tenía 20. La pérdida de la transmisión de la luz minimiza la visión nocturna. Por ello es importante para las personas mayores conducir más lentamente para compensar los cambios en la visión.
3. Visita a tu médico para enfermedades asociadas a la edad – Si tienes algún desorden de la vista como cataratas, debes obtener el mejor cuidado posible ya que puede comportar ceguera si se deja sin tratar. Somete tus ojos a exámenes regulares y sigue siempre el consejo de tu oftalmólogo. Éste te puede aconsejar cirugías recomendadas para tu caso. También puede aconsejarte cambios de estilo de vida y hablarte sobre las precauciones al volante o recetarte gafas para algunas tareas.
Además, lo mejor que debes tener en cuenta mientras conduces, independientemente de la edad, es entender las reglas de la carretera. Recuerda que los accidentes con un vehículo motorizado son la principal causa de heridas en personas de entre 65 y 75, según el Centro para el Control de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC). Nunca des esas estadísticas por supuestas y asegúrate de realizar una conducción positiva y segura y someterte a exámenes regulares de la vista.
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