Las personas que trabajan con frecuencia con productos químicos u otros materiales potencialmente peligrosos deberían usar siempre equipo de protección ocular.

De acuerdo con los expertos, el 90% de las lesiones oculares pueden prevenirse fácilmente. Cada día, tus ojos corren el riesgo de sufrir lesiones, sobre todo si trabajas con material como sopladores de hojas, herramientas eléctricas, productos químicos, cortacéspedes o sierras. Mientras operas con cualquiera de estas herramientas necesitas usar gafas de protección ocular que deben ajustarse adecuadamente a tu rostro para minimizar la probabilidad de que pequeñas partículas entren en los ojos.   

Puedes comprar gafas de seguridad que se ajusten con facilidad sobre tus gafas o, para una alternativa mejor y más confortable, puedes pedir un par de gafas de seguridad graduadas con lentes de policarbonato, Trivex o Xirm.

Programas de Seguridad en el lugar de Trabajo

En los Estados Unidos, los lugares de trabajo que incluyen químicos nocivos o partículas que flotan en el aire, mantiene estándares que guían a sus empleados hacia la seguridad. Sus procedimientos de seguridad deben seguir las directrices de la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA) para situaciones de emergencia relacionadas con cuidado ocular y gafas protectoras. Para verificar estas especificaciones puede visitar su sitio web y buscar información sobre los diferentes temas, incluidos:

• Planes estatales
• Folletos y publicaciones con planes estatales
• Protección ocular y facial
• Estándares generales de la industria

Algunos lugares de trabajo solo necesitan proporcionarte gafas de seguridad que se ajusten encima de tus gafas graduadas.

La mayoría de los estándares de uso de protección ocular exigen que los empleados que ya llevan gafas correctoras, usen gafas o lentes de seguridad. Otros tipos de trabajo pueden necesitar solamente protecciones que resguarden y cubran las lentes naturales del ojo o cristalino

Asegúrate de comprender por completo los riesgos de las lesiones oculares en tu lugar de trabajo y usa siempre el tipo adecuado de equipo de protección ocular. Los empleados deberían buscar la opinión de un oculista concerniente a los procedimientos de seguridad con regularidad, dado que los médicos pueden dar consejos adicionales no provistos por la OSHA.

Airbags

El hecho de que los airbags hayan salvado millones de vidas a lo largo del mundo no es ningún secreto. Desde la introducción de los airbags en 1989, estos han ayudado a los conductores a evitar lesiones potencialmente mortales en accidentes de coches. Sin embargo, a pesar de sus increíbles beneficios, todavía existen algunos problemas que se han planteado respecto a sus desventajas. Estudios han indicado que personas han sufrido lesiones de mayor o menor gravedad a causa de los airbags. Las roturas de muñeca son especialmente comunes debido a que los conductores de más edad tienden a continuar sujetando el volante en una posición de “las 10 y 10”; lo que se enseña comúnmente a los conductores hoy en día es a que sujeten el volante con las manos más abajo, en una posición conocida como “las nueve y cuarto.” También se han registrado muertes a causa de un fuerte despliegue de los airbags.    

El volante debería sujetarse en una posición de “las nueve y cuarto” para evitar roturas de muñeca por el despliegue del airbag.

En la actualidad, los coches nuevos vienen con airbags que saltan con una fuerza menor que las primeras versiones, siendo así más seguros. Aunque es posible sufrir una lesión ocular debido al airbag en caso de accidente, corre más peligro de lesiones graves a causa de un parabrisas hecho añicos. Para minimizar las lesiones relacionadas con el airbag necesita asegurarse de que te sientas a, al menos unos 25 centímetros del volante, sujetando éste en un posición de “las nueve y cuarto”, llevando puesto el cinturón de seguridad y teniendo el soporte adecuado con un reposacabezas apropiadamente ajustado. Además, para prevenir lesiones similares, recuerda no mandar mensajes o realizar llamadas mientras conduces y, si viajas con niños, asegúrate de que estos están sentados en el asiento trasero en las sillas apropiadas y con los cinturones de seguridad ajustados.

Fuegos artificiales, corchos de champán, punteros láser y paintball

Los fuegos artificiales son una de las causas más comunes de lesiones oculares. El Centro de Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) informó que más de 11 mil personas fueron tratadas en los servicios de urgencia debido a lesiones causadas por fuegos artificiales en el año 2005. El CDC notó que las tasas más altas de lesiones relacionadas con fuegos artificiales se dieron entre niños con edades comprendidas entre los 10 y los 14 años y que el 25% de esas lesiones incluían daño ocular. El CDC también añadió que las lesiones más comunes causadas por fuegos artificiales incluyen cuerpos extraños, laceraciones y contusiones.  

Lesiones oculares graves, e incluso ceguera, pueden ocurrir si no eres prudente con cosas como los fuegos artificiales o corchos del champán.

La Academia Americana de Oftalmología sugiere algunas directrices de seguridad relativas al uso de fuegos artificiales:

• No permita que los niños jueguen con fuegos artificiales o material pirotécnico
• Los fuegos artificiales deben observarse desde, al menos, unos 150 metros de distancia
• Los fuegos artificiales sólo deben ser encendidos por profesionales entrenados para ello
• Los restos de fuegos artificiales que no han explotado no deben tocarse. Si encuentras alguno, llama a los bomberos o a la policía.

Los corchos de champán se encuentran entre algunas de las causas más comunes de lesiones oculares. Durante Fin de Año, al abrir una botella, una lesión ocular es probablemente lo último por lo que te preocupas que suceda. Sin embargo, un corcho que sale disparado de una botella de champán puede dañar significativamente tu globo ocular o puede llevar a un desprendimiento de retina. Ambas pueden causar ceguera. La Academia Americana de Oftalmología declara que este tipo de lesiones por lo general suceden al abrir botellas de champán frías, ya que el corcho tiende a salir disparado con mucha más fuerza. 

Puedes prevenir que este tipo de desafortunadas lesiones ocurran simplemente apuntando la botella de champán en dirección contraria a ti y a cualquier otra persona cuando vayas a abrirla. Puedes minimizar la fuerza en la que el corcho sale disparado colocando una toalla o paño sobre el corcho y manteniendo las manos sobre él mientras lo retiras con un movimiento giratorio.

Se deben usar gafas de seguridad durante todo el tiempo que se juega paintball o airsoft.

Punteros láser:  poseen un rayo de luz de gran intensidad y a menudo se usan en presentaciones en reuniones y clases. Mirar directamente al rayo de luz puede causar pérdida temporal de visión y daño permanente a la retina. El límite legal en los Estados Unidos para la potencia del láser en un aparato portátil es de 5mW, la Academia Americana de Oftalmología recalca enérgicamente la necesidad de mantener el rayo del láser alejado de los ojos y de superficies reflectantes.

Paintball y airsoft: son divertidos, pero peligrosos. Si eres un gran aficionado a este tipo de juegos, asegúrate de llevar el equipo de protección adecuado mientras juegas. Las armas usadas en estos juegos tienen la capacidad de propulsar la munición a una velocidad de unos 280 km/h.

Las lesiones relacionadas con el paintball y el airsoft incluyen desprendimiento de retina, hifema o acumulación de sangre dentro del ojo, cataratas traumáticas, fracturas de la órbita ocular y glaucoma. Estas pueden además resultar en ceguera total o parcial. Conclusión: Nunca te quites ningún elemento de tu equipo de protección mientras todavía estás jugando, ¡y eso incluye las gafas y el casco!