La miopía es un defecto refractivo común que se caracteriza por el desenfoque de los objetos lejanos siendo capaz de ver claramente de cerca.

La miopía afecta a hombres y mujeres por igual. Generalmente es causada por un globo ocular alargado; como consecuencia, la luz se centra en un punto delante de la retina haciendo que los objetos lejanos se vean borrosos.

Otra causa puede ser un globo ocular demasiado curvo, la luz se refractará con demasiada fuerza provocando que la luz acabe delante de la retina.

La miopía se suele detectar en una edad temprana, cuando el niño comienza a quejarse de poder leer la pizarra, pero puede leer fácilmente libros. También es cierto que en muchos casos la miopía empeora progresivamente hasta que una persona deja de crecer alrededor de los 20 años.

Una vez que uno es diagnosticado, son esenciales los controles frecuentes de la vista. Como la miopía tiende a progresar con el tiempo, la prescripción va cambiando, lo que significa que serán necesarias nuevas lentes de contacto o gafas para acomodar la prescripción a medida que cambia.

La miopía es parcialmente hereditaria, lo que significa que tienes más posibilidades de ser miope si alguno de tus padres lo es. No hay forma de prevenir la miopía.

Las gafas y las lentes de contacto corrigen fácilmente la miopía. También, la cirugía LASIK se está volviendo una opción más común entre adultos. Sin embargo, el LASIK no es recomienda para niños y adolescentes; una persona debe esperar para someterse a cirugía a que sus ojos están totalmente desarrollados.